El trabajo y el esfuerzo son las herramientas que nuestros monitores ponen al alcance de los peques para que sea una constante en su vida. Desde el inicio les preparamos para enfrentarse a los retos de la vida desde un punto de vista deportivo, iniciándoles en un nivel elemental y enseñándoles a crecer en técnica y habilidades.

Cada temporada pasan por nuestras escuelas más de 600 alumnos. Muchos de ellos han alcanzado con éxito el nivel de competición y, para conseguirlo, utilizamos estrategias de enseñanza muy específicas y adecuadas a cada tipo de deportista. El verdadero valor de nuestras escuelas reside en la tasa de retorno y compromiso de los alumnos.

Nuestra escuela elemental comienza a los 4 años y nuestros monitores cuentan con una gran experiencia en la enseñanza de los más pequeños, edades donde la complejidad es evidente. Cada alumno del Sporting es único, por eso contamos con un sistema de enseñanza reglada basada en la motivación que nos ha dado muy buenos resultados, ya que está ligado a programas de formación de técnicos nacionales desde la RFET, FPCV y las Federaciones Territoriales (con la expedición del titulo oficial que otorga el Gobierno autonómico), lo que hace que nuestra escuela se adapte a las necesidades de cada alumno.

Es muy común que los benjamines se interesen por la competición siendo muy jóvenes, por eso, le dedicamos especial atención a esta etapa. Así, en el Sporting contamos con un programa muy completo de competiciones (que se extiende desde el mes de noviembre hasta el fin de la escuela) que animan a los más pequeños a iniciarse en todo tipo de torneos. Pero, por encima de estos distintos estímulos individuales, tratamos de conseguir un progreso técnico y físico, que les haga experimentar el tenis por el tenis.

Resulta muy gratificante ver como todos nuestros alumnos han evolucionado a lo largo del curso, y por ello organizamos un campeonato en el que participan todos aquellos que nos han acompañado a lo largo del año. En este torneo los alumnos pueden poner en práctica todo lo aprendido durante el curso y, entre todos, configuramos una gran familia que ha trabajado unida y que ahora participa del fomento de la competición.